Mañana de muchísimos sueños, con escenarios
variopintos y sucesos peculiares. Ahí van algunos:
1 pierdo la cartera en un gran banco Estoy
en la caja de ahorros donde trabaja mi padre, para hacer unos trámites. En el
sueño, la oficina es inmensa, llena de gente y ampliada con todo tipo de
secciones, como si se tratase de un supermercadode lujo. Me atiende una joven
con el pelo negro intenso, de aspecto muy bien cuidado y de trato correcto.
Resulta que voy a recoger una gran cantidad de dinero, gracias a alguna
operación que ha salido muy bien. Incluso en la oficina me obsequian con un
plato de comida, elaborado por un joven cocinero que anda por allí y a quien
han contratado recientemente. Una vez terminado el papeleo me despido y me voy.
Todavía ando por los pasillos de la caja de
ahorros cuando me doy cuenta que me he dejado la cartera con el dinero encima
del mostrador. Sobresaltado, intento hacer marcha atrás, y voy recorriendo
muchas secciones, como una muy amplia de perfumería, pero no encuentro el
mostrador donde estaba. Me abro paso entre el gentío para salir a la calle y,
una vez allí, ya resignado a que me habían robado, aparece mi tía Esther con
una amiga, sonrientes, y me entregan la cartera. Se lo agradezco con entusiasmo
y nos deseamos unas felices navidades.
2 acrobacias con búhos Un
extraño pueblo, quizá extranjero, donde ocurren escenas tremendamente curiosas.
Por ejemplo, un hombre saltimbanqui va haciendo acrobacias en al aire,
encadenado a un búho y a otras aves, que se van engarzando unas a otras cual
gimnastas. Lo fotografío todo, comprobando después que los instantes han
quedado bien retratados.
3 el artista de la madera También
visito una especie de taller minúsculo y sin puertas, muy iluminado con unas pequeñas
ventanas, donde trabaja un artista catalán que trabaja la madera. Por allí
abundan restos de serrín, formas rotas y poco atractivas. Intento observar
dónde está su supuesta genialidad, pero no lo consigo.
4 me lanzo por una cascada Es
de noche y trepamos por las rocas, a la vera de una inmensa cascada. Una vez
arriba, para vencer mi sensación de vértigo y mi miedo, decido lanzarme al
vacío. Sin embargo, una vez me tiro, la mecánica parece lenta y prosaica; me
voy cayendo por fases y sin dolor alguno (el día antes había visto en el cine ‘Sherlock
Holmes 2’, en que el detective se precipita también por una cascada junto a su
enemigo Moriarty).
5 courbet se suicida Una
gran estantería de libros. De pronto, el pintor Gustave Courbet, convertido en
un ente impersonal o libresco, sin forma humana alguna, resuelve suicidarse, y
lo hace recorriendo toda la estantería, inclinándola y cayendo después al
suelo. Al parecer, Courbet ha ido de algún modo metiéndose en cada libro,
sacudiendo sus personajes o sus contenidos, y se ha entretenido mucho en los
que tenían que ver con su amada novia, con quien tenía una relación
exageradamente romántica y almibarada. Contemplamos la escena con ironía y
distanciamiento (antológicos).